El fallecido músico vivió allí entre 2001 y 2003. Los restos óseos se encontraron durante obras de excavación en dicho terreno.
Una de las casas en donde vivió el fallecido músico Gustavo Cerati, ubicada en el barrio porteño de Coghlan, fue lugar de un hallazgo inquietante y aterrador: encontraron restos humanos que motivaron la apertura de una investigación.
La propiedad pertenecía a Marina Olmi, hermana del actor y conductor Boy Olmi, quien la alquiló al exlíder de Soda Stereo entre los años 2001 y 2003.
Durante esa época, fueron frecuentes visitantes del inmueble figuras como Charly García, Fito Páez, Hilda Lizarazu y Tito Losavio, todos amigos del círculo artístico de la propietaria.
En el último tiempo, la artista plástica decidió vender la vivienda, y en ese terreno se levantará un nuevo edificio: “Era una casa luminosa, pero tenía algo oscuro en el fondo”, recordó. A su vez, mencionó que hubo incidentes extraños en el lugar, como el incendio espontáneo de un árbol que se encuentra cerca de la pileta.
Mientras se llevaba a cabo la excavación inicial de cara a la demolición del viejo inmueble, los trabajadores hallaron restos óseos bajo tierra, Tras la intervención de la Policía, se comprobó que los huesos eran humanos, y que también se encontraron pertenencias tales como relojes.
La investigación descarta que los restos encontrados daten de la época en la que Cerati vivió allí, y vinculan el hallazgo con el periodo en el que funcionó un geriátrico en el lugar o épocas más lejanas, cuando había una capilla con más de 150 años de antigüedad.
