Tenía 80 años. Fue secretario general del Movimiento Justicialista y uno de los hombres más cercanos al ex presidente en su retorno al país, luego de 17 años de exilio.
Juan Manuel Abal Medina (padre), dirigente político clave en los años más turbulentos del peronismo y hombre de extrema confianza de Juan Domingo Perón, falleció este domingo a los 80 años tras una larga lucha contra la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC).
La noticia fue confirmada por su familia a la web de Infobae. Su muerte marca el final de una etapa para una generación de dirigentes que vivió desde adentro la reconstrucción del peronismo en los años ‘70, luego de casi dos décadas de proscripción.
Abogado, periodista y militante peronista, Abal Medina fue designado secretario general del Movimiento Justicialista en 1972. Desde ese lugar, tuvo un rol decisivo en las negociaciones para facilitar el regreso de Perón al país luego de 17 años de exilio. Su gestión fue fundamental para recomponer la estructura partidaria, en un momento de fuertes tensiones internas entre la juventud peronista revolucionaria y el sindicalismo tradicional.
En su juventud, Abal Medina había abrazado el nacionalismo católico, pero con el tiempo fue ganando cercanía con el pensamiento peronista, hasta convertirse en uno de los interlocutores privilegiados del General. Su lugar dentro del círculo íntimo de Perón se consolidó en plena efervescencia política de los setenta, durante los intentos por articular una salida democrática luego de la dictadura de Onganía y sus sucesores.
Su hermano, Fernando Abal Medina, fue uno de los fundadores de Montoneros y murió en un enfrentamiento armado en 1970. Aunque Juan Manuel nunca perteneció a la organización guerrillera, esa historia familiar marcó su trayectoria y lo ubicó en un lugar incómodo dentro del movimiento, intentando tender puentes entre sectores enfrentados.
En declaraciones que dio años más tarde, Abal Medina reflexionó sobre su relación con Perón y el momento histórico que le tocó vivir. En su libro “Conocer a Perón”, intentó desmitificar al líder y recuperar la esencia doctrinaria del movimiento justicialista, al que siempre defendió como la verdadera herramienta para sacar adelante al país. “El peronismo de las mayorías populares era tan fuerte que hoy está desdibujado por los intentos de hacer peronismo con otra cosa”, declaró en una entrevista reciente.
También cuestionó con dureza la falta de formación doctrinaria de las nuevas generaciones: “La gente joven no tiene la menor idea de lo que es el peronismo. Este es el drama”.
En ese sentido, Abal Medina reconoció que tanto el kirchnerismo como el menemismo intentaron, a su manera, interpretar el peronismo, pero siempre creyó que era necesario “hacer peronismo de nuevo” y volver a estudiar a Perón. “Por eso escribí el libro”, dijo.
Sus restos serán despedidos este lunes en una ceremonia íntima en el Cementerio de la Recoleta.
