La ex presidente condenada por corrupción comunicó en el canal de su propiedad, C5N que será candidata en las elecciones de la Provincia de Buenos Aires.
En un escenario político marcado por la incertidumbre electoral y la fragmentación interna del peronismo, Cristina Fernández de Kirchner sorprendió al confirmar su candidatura a legisladora provincial por la provincia de Buenos Aires. Lo hizo en una entrevista televisiva en su canal, C5N con Gustavo Sylvestre, conductor del programa Minuto Uno, donde además se espera que repase la actualidad social, económica y política del país.
En una nueva maniobra que ha despertado fuertes reacciones en distintos sectores, Cristina Fernández de Kirchner confirmó que será candidata en las elecciones legislativas provinciales que se celebrarán el próximo 7 de septiembre en la provincia de Buenos Aires. La exmandataria —que ya fue condenada en primera instancia por corrupción en la causa Vialidad— se postulará como legisladora por la tercera sección electoral, una de las regiones históricamente más leales al peronismo.
“Si alguien tomó la decisión del desdoblamiento pensando que la oposición (de la Provincia) iba a ir dividida, pero no será así”, lanzó Cristina durante la entrevista, en clara crítica al Gobierno bonaerense, sin mencionar nombres pero dejando entrever el malestar dentro del propio peronismo.
“Hay que poner el hombre para hacer la mejor elección posible”, declaró durante la entrevista con el periodista Gustavo Sylvestre, una de las voces más cercanas al kirchnerismo. Desde su rol como presidenta del Partido Justicialista (PJ), Cristina llamó a la unidad del espacio peronista y manifestó su preocupación por los efectos del desdoblamiento electoral entre Nación y Provincia, el cual consideró «inconveniente» para el oficialismo.
“La provincia es muy grande, 17 millones de personas que van a tener que ir a votar dos veces en ocho semanas”, sostuvo, al tiempo que cuestionó la posibilidad de un mal desempeño electoral en territorio bonaerense. “¿Cómo va a irradiar eso al resto del país?”, preguntó retóricamente, marcando el temor del peronismo a perder su enclave clave.
Durante la charla, la expresidente también hizo referencia a los resultados obtenidos en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, donde el peronismo alcanzó un 27,4% de los votos, cifra que atribuyó a la unidad interna de las listas. “No es que la unidad te permita ganar, pero si estás dividido podés perder y perdés mal”, sentenció.
En relación con la posibilidad de suspender las elecciones de septiembre —una especulación surgida ante el caos del cronograma electoral—, Kirchner descartó de plano esa alternativa: “No le pediría jamás a un gobernante que cambie su decisión”. Sin embargo, deslizó una crítica indirecta a los actuales responsables de la gestión provincial:
“Si hubiera tomado una decisión basada en presupuestos fácticos que después no se dieron, yo revisaría mi decisión. Los hombres tienen otra forma de decidir. El hombre siempre tiene una cosa de que si no hace lo que él dice se pierde. Yo nunca tuve ese problema. Si me tengo que retractar porque desaparecieron los presupuestos fácticos, lo hago”.
Sobre las críticas que recibió por postularse a un cargo legislativo provincial luego de haber ocupado la presidencia en dos mandatos consecutivos, Cristina respondió con una comparación que buscó desdramatizar su decisión: “Eso lo dicen los que creen que la política es un escalafón. Les voy a recordar a un compañero como (Jorge) Capitanich, que fue dos veces gobernador, jefe de Gabinete dos veces y luego candidato a intendente en Resistencia para ayudar a que el peronismo ganara la provincia de Chaco”.
Para cerrar, defendió su postulación por la tercera sección electoral, alegando que se trata de una zona «subrepresentada». Extendió esa crítica al Conurbano bonaerense en su conjunto, sosteniendo que el interior de la provincia tiene “mayor representación con mucha menor cantidad de gente”.
“Vos tenés que ir al lugar en el que más servís en el momento en que es oportuno. Yo pienso la política de ese modo. Para mí es eso: apostar a que el proyecto colectivo vaya para adelante”, concluyó.
El anuncio llega mientras el Partido Justicialista continúa definiendo su estrategia electoral en la provincia de Buenos Aires, con múltiples sectores en pugna y una dirigencia que no logra renovar sus cuadros ni ofrecer alternativas creíbles tras los magros resultados de los últimos años.