
El ala dura del gobernador considera que no hay vuelta atrás. Acusaciones post derrota y derribo de puentes. Presión de intendentes y escobazo al gabinete.

La derrota electoral en Buenos Aires volvió a derrotar la interna del peronismo, que habían mantenido en pausa durante la campaña. Conocida la victoria de La Libertada Avanza de este domingo, La Cámpora volvió a señalar el desdoblamiento que impuso Axel Kiciloff como motivo de la ola violeta. En La Plata hay mucho enojo y cerca del gobernador dan por terminada la relación con la tropa que conduce Máximo Kirchner.
Axel Kicillof y Máximo Kirchner, asuntos separados
En La Plata afirman que entre las partes habrá “el diálogo necesario” relativo a los proyectos que el Ejecutivo necesita llevar a la Legislatura, “pese a que hace seis meses que estamos tratando de que nos aprueben la ley corta”, que contiene el endeudamiento, disparan.
La estrategia de CFK
En el gobierno bonaerense consideran que la derrota se debe a una mala estrategia nacional, incluida la conformación de una lista que no tuvo a todas las expresiones representadas. En efecto, la de octubre fue la lista de CFK.
“Cuando plebisitamos la gestión de la provincia, ganamos; la gente nos acompañó. Alguno habrá elegido no ir a votar, pero también no votarnos en contra; ahora nos fueron a votar en contra: lo que le propusimos a la gente como alternativa a nivel nacional no la convenció, hay que escuchar un poco mejor”, afirmó a Letra P alguien del gabinete bonaerense.
Más catarsis: “Los resultados del domingo demuestran que la estrategia del desdoblamiento tenía un porqué. Cuando discutimos la provincia, los municipios contra el modelo de Milei, ganamos; pero cuando discutimos la alternativa nacional, no. Entonces, tendremos que repensar lo que ofrecimos en octubre”, agregó.
Reunión con el MDF y cambios en el gabinete
Esta semana, posiblemente el viernes, Kicillof reúna a los intendentes alineados en el Movimiento Derecho al Futuro (MDF). Analizarán la elección, los pasos a seguir y planificar lo que queda del año y el comienzo del próximo. Intendentes kicillofistas están muy enojados con La Cámpora y no faltarán pedidos al gobernador para que endurezca posiciones.
“Tenemos que estar atentos a cómo seguimos siendo escudo y red. Después, si Mayra (Mendoza) tuitea o no, si Máximo hace caritas o no… son cosas chiquititas al lado de lo que le pasa a la gente”, se quejan en calle 6.
“Si nos seguimos mirando el ombligo vamos a ser menos que la izquierda. Si no salimos de ese círculo vicioso no vamos a ganar nunca más una elección”, agrega una fuente del entorno más cercano del mandatario aunque reconoce que se tendrán que sentar a discutir en conjunto un “paquete” de temas.
La guerra desbocada tras la derrota podría cristalizarse con cambios en un gabinete donde conviven camporistas y kicillofistas. En el sector de los intendentes hay quienes le piden a Kicillof que corra a todas las figuras de La Cámpora. Final abierto.


