7.5 C
Buenos Aires
7.5 C
Buenos Aires

El concejal massista detenido señaló que “la Justicia tiene que ir para arriba” si quiere encontrar a los verdaderos jefes

COMPARTIR

Se trata de Facundo Albini, que junto a su padre fueron imputados como los líderes de la asociación ilícita que se quedó con 800 millones de pesos del Estado, a través de la designación de empleados fantasmas en la Legislatura bonaerense.

Mientras era trasladado hacia el tribunal platense en donde se entregaría ante el juez Guillermo Atencio, tras ser señalado como el líder de la organización política que robaba al Estado, Facundo Albini, hizo algunas declaraciones en las que señaló que la “Justicia tiene que ir para arriba” si quiere encontrar a los verdaderos jefes.

Es que el apoderado del partido fundado por Sergio Massa, el Frente Renovador, y concejal reelecto en La Plata, dentro de la lista encabezada por el nuevo intendente el cristinista Julio Alak, fue señalado como el líder de la asociación ilícita que se quedó con unos 800 millones de pesos del Estado bonaerense, en el marco de la investigación que inició con la detención del puntero del PJ, Julio “Chocolate” Rigau.

“Hacernos responsables a mí o a mi padre por todo esto es un montón, es un error”, señaló el concejal acompañado de su abogado defensor, Gustavo Galazzo, antes de entregarse a la Justicia que había pedido su detención y la de su padre, Claudio Albini.

Facundo y Claudio Albini.

En ese sentido, indica que desde el poder bonaerense lo usan de “carnero”, ante la posibilidad de que surjan nuevos nombres en la causa que investiga el fraude al erario público. “Yo tenía relación con ‘Chocolate’ Rigau, claro que sí, pero hay otros que tienen que hacerse cargo”, sostiene según reporta el diario La Nación.

“Alguien pidió nombrar a cada una de esas 48 personas que ingresaron a la Legislatura bonaerense y cuyas tarjetas tenía Rigau. Y no fuimos nosotros”, reitera Albini. A lo que agrega: “Fíjese quién firmó sus contratos; quién pidió que los contrataran. Hacernos responsables a mí o a mi padre por todo esto es un montón, es un error”.

En esa línea, explica: “Yo tenía relación política con Chocolate. Eso es innegable. Rigau es un militante histórico del PJ y yo soy apoderado de Unión por la Patria en la provincia, y vengo del Frente Renovador. Si revisan a fondo ese teléfono van a encontrar miles de mensajes entre nosotros”.

Se refiere a la pericia que llevó adelante la Justicia sobre el celular de Rigau, que fue confiscado el pasado 9 de septiembre cuando el referente massista fue detenido mientras extraía dinero de 48 tarjetas de débito en una sucursal del Banco Provincia.

“Hablamos sobre la distribución de las “copas de leche” para los pibes, sobre dónde poner pasacalles de nuestro espacio y mucho más. Por eso le pagaba yo 200.000 pesos por mes. Pero, ¿de lo otro? Otros se tienen que hacer cargo de eso. ¡Si yo hace cuatro años que no estoy en la Legislatura y mi viejo no tenía firma para designar empleados!”, admite el ahora nuevo detenido en la causa.

Al ser consultado sobre la intervención del actual director de Personal de la Legislatura de la provincia de Buenos Aires, Pablo Parente, en la organización, Albini sostiene: “No, apunte más arriba. La Justicia tiene que ir para arriba”.

“Parente no es el que pide que se designe a un empleado, ni el que decide a quién se contrata. Tienen que buscar quién dijo “quiero designar a este o a este otro”. No hay que buscar al que firma, sino al que pide”, explica el reelecto concejal platense.

Respecto a la operatoria para designar empleados fantasmas a los cuales se les retenía el sueldo para ser repartido en el sostén político, Albini indica: “Esto no es que cualquiera pasa por la vereda de la Legislatura, entra y dice que quiere ser empleado y ya está. Alguien tiene que pedir que lo designen. O un diputado, o una autoridad de la Cámara”.

“Tengo muchas ganas de hablar ante el juez”, concluye el referente cercano al ministro de Economía de la Nación, que no se ha pronunciado sobre el tema, a pesar de ser uno de los mayores escándalos de desvió de fondos públicos en medio de la campaña presidencial que Massa terminó perdiendo.

MAS NOTICIAS