El gobernador del Chaco, Jorge “Coqui” Capitanich, principal responsable político del crimen de Cecilia Strzyzowski, hace 36 años que está en la función pública, a la cual arrastró a casi toda su familia.
El actual gobernador del Chaco, Jorge “Coqui” Capitanich, vive del estado hace 36 años, desde los 22 años se dedica a la función publica y casi todos los miembros de su familia siguieron sus pasos.
Sus dos hijas, Jorgelina Ema y María Guillermina, según reportó el portal El Disenso, son parte del Estado. La primera fue nombrada asesora de la Dirección General de Cultura y Educación de la provincia de Buenos Aires en marzo de 2020, un año antes de obtener el título de Licenciada en Ciencias Políticas.
Su hermana, María Guillermina, también pertenece al Estado que comanda “Coqui”. Está a cargo de Chaco TV, la Agencia FOCO y Radio Provincia, siendo la Directora de Medios Públicos.
Sandra Mendoza, su exesposa y madre de sus hijas, fue diputada y es parte de la planta permanente de la Honorable Cámara de Diputados de la Nación en la categoría A-1-P.
Quien también tiene un sueldo del Estado es su hermano, Mateo Daniel Capitanich, nombrado embajador en Nicaragua. Su esposa, Mónica Estela Pereyra, ocupó varios cargos y hoy en día es la vicepresidenta de Fiduciaria del Norte S.A., empresa con participación estatal de la Provincia del Chaco.
Néstor Avalle, mano derecha histórica y ex pareja de “Coqui” y su reemplazante en el directorio del la ex AFSCA cuando el corrupto chaqueño fue convocado por Cristina Kirchner a la jefatura de Gabinete. Periodista de profesión, tuvo a su cargo la pauta publicitaria de la gobernación chaqueña y fue, además, vocal de Lotería. Una danza de cargos que serían la punta de lanza de la “relación” que lo une a Capitanich.
Avalle quedó involucrado como el “tercero en discordia” en la pelea entre Capitanich y Sandra Mendoza en 2009, cuando la entonces esposa del mandatario estrelló un auto contra la Gobernación. Fuentes del peronismo local contaron que la mujer habría encontrado a “Coqui” y Avalle en una situación embarazosa en el propio despacho oficial, lo que habría desatado su furia. “Esa fue la verdadera razón de la separación”, aseguran.
Para cerrar el círculo familiar se encuentra el hijo de la pareja, Branco, quien está en la planta de la Administración Nacional de Seguridad Social (ANSES).
